Decisiones y Felicidad

1.     DECIDIR ES VIVIR, NO DECIDIR ES NO VIVIR.

Los humanos decidimos continuamente, y con estas decisiones queremos contribuir a alcanzar la felicidad o por lo menos a mejorar nuestra vida. Hay varios tipos de decisiones, pero todas por insignificantes que parezcan tienen sus consecuencias.

Las decisiones las podemos tomar nosotros, las pueden tomar otros por nosotros o nosotros podemos decidir por otros, lo importante es saber decidir bien para poder funcionar bien como seres humanos y tener una vida satisfactoria.

2.     DECISIONES Y AUTORREALIZACIÓN.

Encontramos una felicidad duradera que no depende de agentes exteriores sino del uso de la capacidad de decisión. Esta felicidad tiene que ver con el desarrollo pleno de nuestra libertad interior.

Las decisiones dicen sobre nuestros límites humanos, debilidades, así como nuestra creatividad o nuestros valores.

Con las decisiones orientamos nuestra vida y llegamos a nuestra vocación personal, para reconocer las prioridades de cada etapa, sabiendo renunciar a cosas.

3.     LA TOMA DE BUENAS DECISIONES. LA PUESTA EN OBRA.

Tomar decisiones y llevarlas a cabo es muy importante, porque así estamos participando de la libertad. Estas decisiones pueden ayudarnos a crecer y ser felices o pueden dificultarnos nuestro desarrollo personal.

Tenemos que tomar buenas decisiones, siempre haciendo un uso responsable de la libertad. Para tomar estas buenas decisiones, contamos con recursos que nuestra experiencia personal nos muestra. Contamos con sabiduría, inteligencia y voluntad. Sin embargo, tenemos que tener en cuenta que algunas decisiones fracasan, aunque se hayan tomado bien y sean constructivas.

Tenemos que esforzarnos porque nuestras decisiones sean constructivas ya que lo que está en juego es nuestra realización personal y nuestra realidad profunda.

4.     LAS CONCIENCIAS: TIPOS, EMERGENCIA, DISTINCIÓN.

Existen tres tipos de conciencia: la conciencia socializada, normas que aprendemos prácticamente por osmosis, este conjunto de normas morales que adquirimos en la infancia constituye nuestra conciencia socializada, esta herencia nos ayuda a forjarnos como somos y a tomar decisiones; la conciencia cerebral, se da en la adolescencia y es capaz de pensar y decidir por sí mismo, a partir de un código de conducta, principios y reglas que consideramos buenas; la conciencia profunda, capta el sentido de nuestro bien, nuestra realización personal, cuenta con cinco lugares (ser, yo-cerebral, cuerpo, sensibilidad y conciencia profunda).

Al tener estos tres tipos de conciencia, en ocasiones nos cuesta más decidir.

5.     EL DISCERNIMIENTO COLECTIVO Y LAS DECISIONES EN PAREJA.

Nos va a permitir tomar decisiones que nos permiten alcanzar unos fines de grupo, objetivos y una cohesión hasta alcanzar la unidad. Por ello debemos tener un sentimiento de pertenencia al grupo, así como a la pareja, llegando a que los dos sintamos un nosotros. Un nosotros que está dentro de cada uno, y que se favorece con tiempo para conocerse, comprenderse y amarse.

Los discernimientos colectivos, no son para nosotros mismos, sino que están involucrados varios miembros del grupo, que están comprometidos en tomar decisiones, para alcanzar un fin común, y esto nos ayuda a alcanzar la felicidad.

6.     RENUNCIAS Y EXIGENCIAS EN LA TOMA DE DECISIONES.

La opción es por algo bueno, algo constructivo para nosotros. Pero al tomar una decisión entre varias, muchas veces nos es difícil renunciar a las otras alternativas porque también nos pueden atraer. Sin embargo, cuando elegimos la más conveniente, las renuncias que hacemos, tienen que ser asumidas para que no interfieran en las decisiones tomadas consciente, libre y responsablemente. Podemos lograrlo si contamos con motivaciones como conseguir grado de libertad y autonomía.

Por tanto nos apoyamos en los beneficios de la decisión constructiva y en las motivaciones para avanzar en nuestro camino personal.

7.     LOS CONDICIONAMIENTOS DE NUESTRA LIBERTAD.

No debemos olvidar que como humanos tenemos derecho a vivir nuestra vida y nuestra existencia en libertad. Es nuestra aspiración fundamental. La libertad interior se siente cuando  uno actúa fiel a su conciencia profunda.

Nos podemos encontrar con distintos condicionamientos: condicionamientos externos e internos.

Para poder ser libres aun estando los condicionamientos, hay que seguir un proceso: Querer ser libre, conocer los condicionamientos, aceptar los condicionamientos, tener en cuenta la globalidad de quiénes somos y el entorno en que vivimos, y optar por ser fieles a la conciencia profunda.

  

8.     DECIDIR EN FUNCIÓN DE LAS PRIORIDADES DE NUESTRO SER.

A lo largo de nuestra vida vamos decidiendo según lo que nos interesa o lo que consideramos importante para nosotros.

Como personas queremos crecer y desarrollarnos, y aquí es donde manifestamos nuestras prioridades, y así vamos guiando nuestro camino.

Si tomamos las decisiones, teniendo en cuenta lo que nuestro ser manifiesta, como prioritario en cada etapa, vamos a colaborar en nuestro crecimiento personal, llegando en definitiva a una experiencia de felicidad donde damos sentido a la vida.

9.    MI EXPERIENCIA PERSONAL DE LA TOMA DE DECISIONES Y EL PROCESO DE CRECIMIENTO.

En la historia personal de Mª Teresa Feja hubo una serie de factores que determinaron como mecanismo de defensa vivir volcada en cada plan que creía que le daría la felicidad. Vivía de fondo un vacío cuando alcanzaba las metas que se había planteado y nunca era suficiente.

Cuando se dio cuenta de que ese estilo de vida le producía una profunda insatisfacción, decidió desde la fuerza de su ser cambiarlo. Sin embargo, no fue nada fácil, pues aparecían temores e inseguridades, pero iba escogiendo lo esencial en su vida, dejando por el camino cosas innecesarias.

10.  LO QUE ME DIFICULTA Y LO QUE ME AYUDA A DECIDIR BIEN.

Una de las dificultades  para decidir es la prisa, querer decidir rápido, no darse tiempo para discernir. Esto le suele pasar a Bernardo en pequeñas decisiones de la vida cotidiana. En otros casos, cuando la decisión es más compleja, la dificultad es no tener ganas de hacer un discernimiento en detalle, sentir pereza para ello. En esas situaciones lo que no le ayudaba para nada era desesperarse, perder la paciencia, y disgustarse por dudar.

Por el contrario lo que le ha ayudado a discernir bien, es valorar la importancia de discernir. Valorar la importancia de tomar una buena decisión puso en marcha en él un conjunto de buenas actitudes claves para escucharse a fondo y comprometerse en la búsqueda de la buena decisión.

11.  EL VALOR DEL DISCERNIMIENTO EN LO COTIDIANO.

Muchas veces puede sorprendernos todo lo que nos aporta el discernimiento en las decisiones aparentemente pequeñas de la vida cotidiana, pues escucharse a uno mismo y decidir desde ahí, transforma lo cotidiano en algo único y constructivo para sí y para aquellos a quienes se dirige la acción.

También es cierto que en muchas ocasiones nos dejamos llevar por lo cotidiano sin optar realmente por lo que nos construye en esas situaciones concretas, y sólo cuando caemos en la cuenta de nuestra insatisfacción y acudimos al discernimiento, podemos optar y retomar el camino que realmente nos satisface y da sentido.

12.  LIMITACIONES DEL CUERPO – TOMA DE DECISIONES Y FELICIDAD.

Carmen es maestra especialista en Audición y Lenguaje, y trabaja en un colegio público de Infantil y Primaria. Desde el año y medio de edad, padece una discapacidad muy importante a causa de una poliomielitis infantil.

A lo largo de su camino personal, en esas circunstancias de limitación del cuerpo, detectó una gran dificultad que le complicaba mucho la toma de decisiones, provenía de la no actualización de su imagen corporal, de su no aceptación. Todas esas dificultades las ha ido solventando gracias al trabajo personal que ha hecho y sigue haciendo. Asegura que es posible ser feliz y desplegarse aún en medio de una circunstancia de limitación corporal. He ahí donde radica la grandeza  de la VIDA  de todo ser humano.

13.  “TÚ PUEDES SER FELIZ”. MI EXPERIENCIA DE FELICIDAD.

Dándonos  una oportunidad y teniendo coraje para enfocar nuestra vida en una dirección, somos capaces de experimentar la auténtica felicidad. Es positivo escuchar nuestro interior y ponerse en marcha paso a paso en la medida de nuestras posibilidades lo que hoy podamos. Debemos saber que tenemos derecho a ser felices y aptitudes para ello. No tenemos que gustar a nadie, ni pasar ningún examen ante nadie, sólo tenemos que ser nosotros auténticamente, cada uno con nuestro color.

Las actitudes que ayudaron  y ayudan a Raquel a experimentar la felicidad son varias: apertura de mente, confianza en el otro, paciencia, determinación, fe, búsqueda de la paz interior…

14.   AYUDAR A MIS HIJOS A TOMAR Y EVALUAR SUS DECISIONES.

A raíz de hacer el curso P.R.H sobre la educación de los hijos, Marta, tomó conciencia de la importancia de estar atenta a sus necesidades, y en concreto a la necesidad de aprender a ser, y en este campo concreto de aprender a tomar buenas decisiones. Conforme sus hijos han ido creciendo y han tenido más capacidad para decidir por ellos mismos, más le interesaba más le interesaba comprender su vivencia y acompañarles en ese proceso de encontrar la mejor decisión, la que más les construyera.

15.   NUESTRA EXPERIENCIA EN LA TOMA DE DECISIONES EN PAREJA.

Para Arantxa y Agustín, el P.R.H fue un factor que influyó mucho en su relación, ya que pudieron trabajar la relación y lo que vivían en ella, desde el principio y de forma metódica.

Mencionan tres ideas fuerza que son importantes desde su experiencia de decidir en pareja.

El  método de compartir en pareja como base para el diálogo necesario para desembocar en la buena decisión. Vivir unas buenas actitudes hacia el otro, sinceridad, escucha en profundidad, empatía, comprensión, benevolencia, respeto y apertura. Tomar buenas decisiones en pareja, ayudando a crecer individualmente y a que crezca la pareja.

16.   CÓMO EDUCAR EN LA ESCUCHA DE LA CONCIENCIA.

Educar en la toma de decisiones pasa también por ayudar a identificar las frustraciones que acompañan a la decisión. Tanto si son buenas como si son malas, deben ser asumidas ajustadamente.

También es bueno que los niños y adolescentes tengan la oportunidad de equivocarse y que sean ayudados para aprovecharla.

17.  DECISIONES Y LIBERTAD FRENTE A LOS OTROS/AS.

Durante mucho tiempo a Angelines le resultaba muy difícil decir NO a los demás, esta palabra era como si no existiera en su vocabulario, pues era una persona activa, disponible, con mucho interés por ayudar a los demás. De manera que acabó teniendo tantas “obligaciones con los demás” que se quedó sin tiempo para ella.

La expresión libertad frente a los otros/as se asocia en Angelines con la frase “He de decir no”, con la decisión de decir no, con un largo y a veces costoso y continuo aprendizaje para decir no en lugar de decir siempre sí. Pero al mismo tiempo, asociado a este pensamiento la constatación de lo que ha crecido en decir no y la consolidación, y la felicidad que le ha proporcionado, y la autonomía que vive ahora de cara a bastantes personas.

18.  MI EXPERIENCIA DE FELICIDAD.

Para Inés la felicidad ha sido una conquista, teniendo que nadar contra corriente, siempre en búsqueda y en actitud de lucha permanente. Ella fue una niña poco feliz, con enfermedades, disgustos, ambiente duro de trabajo y sufrimientos. Sin embargo, en medio de todo eso, algo estaba escrito en ella que no le dejaba cesar.

Hoy puede decir, después de encontrar P.R.H en 1980, que es feliz, siente dentro de ella una profunda felicidad hecha de paz y sosiego, de saber que está en el eje de su actuar esencial.

REFLEXIÓN

Tras la lectura de este libro, Decisiones y felicidad, he llegado a la conclusión de que un reto para mí a partir de ahora será encontrar herramientas que me ayuden a favorecer la toma de decisiones constructivas, pues no sé si seré una persona muy indecisa, pero sí es cierto que me cuesta tomar muchas decisiones, y aunque acabe tomando aquella que después de reflexionar es la correcta, me ha llevado un tiempo pensarlo. 

Creo que si todas las personas tuviéramos conocimiento del funcionamiento de nuestra conciencia y sus subtipos, y de herramientas que nos ayudaran a tomar decisiones en muchos momentos de nuestra vida, seríamos más felices.